Un vecino del sector denunció recientemente la reventa de una sepultura en el cementerio Parque de Coquimbo, a pesar de que él había estado pagando la mantención del sepulcro de su esposa durante los últimos 23 años. Según la denuncia, otra persona ajena al grupo familiar fue enterrada en la misma tumba.
El diario El Día envió a un equipo al cementerio Parque de Coquimbo, ubicado en el sector de La Cantera Alta, para investigar esta grave denuncia de reventa de sepultura.
La señora Onesima Ocaranza, esposa de don Viterbo Navea Vega, fue quien dio a conocer este caso. Don Viterbo es el principal afectado por la situación.
En noviembre del año 2000, tras el fallecimiento de su primera esposa, don Viterbo adquirió la sepultura número 2442, que tiene capacidad para tres personas. Durante los años siguientes, él pagó regularmente por el mantenimiento de dicho lugar y se preocupó por mantener en buen estado la tumba de su difunta esposa. Sin embargo, debido a las restricciones sanitarias por la pandemia de Covid-19, se vio imposibilitado de realizar estas labores durante un tiempo.
La sorpresa fue enorme cuando, en el año 2021, don Viterbo regresó al cementerio y se enteró, a través de su actual esposa, que la lápida que habían cuidado durante años ya no estaba. En su lugar, encontraron una nueva lápida que, aunque llevaba el nombre de su difunta esposa, mostraba el nombre de otra persona.
Las autoridades competentes están siendo informadas sobre esta denuncia para que se realice una investigación exhaustiva y se tomen las medidas necesarias. Es fundamental garantizar la integridad y el respeto hacia los espacios de descanso eterno de los seres queridos y evitar cualquier tipo de reventa o irregularidad en los cementerios.