La noche del sábado en la Parroquia San Luis de Coquimbo, lo que debía ser una festividad de bailes religiosos se convirtió en un episodio peligroso debido a un ataque por parte de sujetos externos a la actividad. La situación obligó a suspender todas las actividades religiosas programadas.
Según relatos de testigos, tres individuos comenzaron a hostigar a los participantes de los bailes, lo que desencadenó en un incidente en el que uno de los agresores sacó un arma de fuego que por suerte fue recogida por los propios participantes. Posteriormente, los agresores regresaron arrojando piedras a las personas que se encontraban en la actividad religiosa, incluyendo niños, familias y adultos mayores.
Ante la gravedad de la situación, se dio aviso a Carabineros quienes se presentaron en el lugar. El presidente de la Junta de Vecinos Centro Oriente expresó su preocupación por la reiteración de situaciones violentas en la zona, lo cual ha llevado a la suspensión de las actividades religiosas en la parroquia.
Este tipo de incidentes no solo representan un peligro para la comunidad, sino que también ponen en riesgo el disfrute y uso de los espacios públicos que tanto se han promovido en la zona. Es necesario que se tomen medidas para evitar que hechos como este vuelvan a ocurrir en el futuro.