Se aproxima un fin de semana marcado por la incertidumbre climática en el norte de Chile, con especial atención en las regiones de Atacama y Coquimbo, que se verán fuertemente afectadas por las intensas lluvias pronosticadas a raíz de la baja segregada. Los modelos del ECMWF y GFS han actualizado sus proyecciones, augurando un panorama complejo y preocupante para la zona.
Según los últimos informes de Meteored, se esperan volúmenes significativos de precipitaciones, con montos superiores a los 80 mm en sectores cordilleranos y precordilleranos de Atacama, y sobre los 40 mm en Coquimbo, durante el evento que se extenderá hasta el próximo lunes 15 de abril. Esta situación, aunque podría considerarse positiva ante la sequía extrema en la región, plantea desafíos y riesgos para las comunidades locales.
La baja segregada no solo traerá lluvias, sino también nevadas en zonas elevadas de la cordillera de Coquimbo y Atacama, con pronósticos de intensas precipitaciones en los valles, alcanzando tasas de 5 a 8 mm por hora. La variabilidad en los montos de lluvia estará determinada por la formación de nubes de tormenta, que podrían generar chubascos con impacto diferencial en distintas localidades.
Ante esta situación, se insta a la población a mantenerse informada y preparada para afrontar las posibles consecuencias de las lluvias intensas y tormentas eléctricas que se esperan en el norte de Chile y en sectores cordilleranos de la zona central. La seguridad y la prevención deben ser prioritarias en estos momentos de alerta climática.